The Foetals - Meet The Foetals

Jolan Lewis estrena su casillero de publicaciones con The Foetals al publicar "Meet The Foetals" a través de PNKSLM Recordings. Con el álbum grabado desde hace unos meses, la propia discográfica comunicó que el artista padecía cáncer, del cual se está recuperando, por ello la misma ha decidido donar todo lo recaudado a Cancer Research UK.

Es difícil hacer frente a estas noticias escuchando de fondo su singel debut, 'Fine', en donde rápidamente uno se imagina a Jolan transmitiendo buen rollo a través de una sonrisa de oreja a oreja y vacilando con los colegas que han participado en la grabación del álbum. Si desde aquí pudiera transmitirle algo, sería la fuerza que imprime en 'I'm Down', donde la rapidez de las guitarras bloquea cualquier tipo de sonido audible, distorsionado éste a su vez por la psicodélica trompeta que se autoinvita a la loca aventura de estribillo desgañita gargantas que acaba con todo el mundo por los suelos, dando lugar a una melé-celebración.

Lo último que aparecía en los medio era 'Nothing', con un dream-pop de guitarras navideñas y unos vocales de dejadez total a lo Mac DeMarco que ceden ante la pesadez del estilo sobre el que balancean, despertando casi de golpe gracias a la distorsión ambiental que planea por 'Malted'.

'Together' deja Manchester momentáneamente para recalar en Oxford y visitar vocalmente a Max Levy aka King Of Cats, que sentados en sendas sillas, guitarra y baquetas en mano, se van poniendo románticos hasta darse de bruces con 'The World Isn't That Big' y la oleada de tristeza que tan bien refleja bajo su penumbra 'Moment'.

'Al mal tiempo buena cara' es lo que parece que el señor Lewis quiere transmitir con 'Nearly', dejando los 60's para reverberarse con el surf-rock cincuentero, llegando al baile de bailarinas de salón del oeste en 'Write On', en donde mientras ellas agitan sus piernas al son de la música, las hormonas de los caballeros van subiendo progresivamente hasta que su mezcla con el alcohol desemboca en una de esas peleas que acaban con todo destrozado, como mandan los cánones de la época. El despertar conlleva dolor por la resaca, la cual no es la mejor compañera de viaje, sobre todo encima si uno no se imagina que la historia acaba en Notthingam con una los vocales de Jake Bugg para que 'Move On' no haga otra cosa que quejarse por de la situación vivida, o en la que se tiene ahora.